Elodea, también conocida como yana, es un género de plantas acuáticas que comprende 36 especies, de las cuales solo 6 son aceptadas. Esta planta es robusta y crece en largos cordones separados por verticilos foliares dispuestos a lo largo de los tallos. Sus hojas, de color verde intenso, se disponen en rosetas muy apretadas. En cualquier altura de los tallos pueden emerger raíces adventicias que se dirigen rápidamente hacia el fondo.
Elodea es nativa de Norteamérica y se utiliza extensamente como vegetación de acuario. Sin embargo, su introducción en cursos de agua de Europa, Australia, África, Asia y Nueva Zelanda ha creado problemas ambientales, ya que se considera una maleza peligrosa fuera de su área de distribución original. Elodea canadensis, también conocida como Anacharis, se ha vuelto muy conocida como maleza del agua. Esta planta vive completamente sumergida, excepto por sus pequeñas flores que flotan sobre la superficie del agua.
La Elodea crece en sedimentos limosos y agua rica en nutrientes, lo que favorece su desarrollo en lagos eutróficos. A pesar de ello, se adapta a una amplia variedad de condiciones, desde zonas sombreadas hasta aguas profundas. La planta puede sobrevivir desarraigada en fragmentos flotantes. En su área de distribución original, las elodeas son importantes para los ecosistemas lacustres, proporcionando hábitat para invertebrados acuáticos, peces y anfibios.
La reproducción se produce de manera vegetativa mediante la emisión de hijuelos y brotes durante los meses cálidos. En acuarios, la reproducción ocurre principalmente a través del esquejado de los tallos.
En condiciones óptimas de iluminación, los tallos de Elodea pueden alcanzar hasta 3 metros de longitud, y sus hojas varían en tamaño de 5 a 30 milímetros.
Originaria de Sudamérica, específicamente del sur de Brasil, Argentina y Chile, la Elodea se ha extendido prácticamente por todo el mundo. En algunas regiones, se considera una plaga, lo que ha llevado a su prohibición de comercialización.
Debido a su capacidad oxigenadora, la Elodea ha sido utilizada como planta fácil y económica para acuarios y estanques de jardín. Sin embargo, desde el Real Decreto 630/2013, la tenencia y comercio de Elodea canadensis están prohibidos en España. En los lugares donde su cultivo no es ilegal, debe plantarse individualmente, con una distancia de 5 cm entre tallos para evitar que las raíces se pudran.
La Elodea es poco exigente con las condiciones acuáticas y puede sobrevivir en ambientes con pobre iluminación y falta de nutrientes. Para un correcto mantenimiento, se recomienda el uso de CO₂ y fertilizantes ricos en hierro, ya que las raíces solo son utilizadas para el agarre al sustrato.
La Elodea requiere buena iluminación; de lo contrario, sus tallos se acortarán y su crecimiento se verá afectado.